sábado, 23 de julio de 2011

Cola de Caballo (Equisetum arvense)

La Protagonista de la Semana

Esta es una de las plantas silvestres más primitivas. En la época de los dinosaurios alcanzaban un enorme tamaño. En la antigua Grecia se conocía su capacidad de sanar y cicatrizar las heridas. Existen varias especies de esta planta medicinal, una de ellas es Equisetum arvense, reconocida por sus múltiples propiedades medicinales.
Es un helecho, lo cual hace que no tenga flores, que podemos encontrar en zonas húmedas y arenosas. En esta planta se distinguen dos tipos de tallos: los que emergen de su rizoma, los denominados fértiles, y los llamados estériles, por ser inútiles para ejercer mecanismos de reproducción. Estos últimos presentan a lo largo una serie de estrías y tienen un color verdoso; de ellos salen numerosas ramitas laterales. Se recolectan en verano, y se dejan secar a la sombra, en manojos colgados, donde debemos descartar las partes descoloridas.

Propiedades
Los flavonoides y las sales minerales de la cola de caballo aumenta la eliminación de orina (diurética).
El ácido silícico y los flavonoides ejercen un efecto astringente dermatológico, contribuye al mantenimiento de la sustancia fundamental del colágeno por los fibroblastos, aumentando la elasticidad de los tejidos. Su efecto depurativo previene las arrugas, atenúa las estrías y regenera los tejidos dañados por las variaciones de peso.
Su contenido en silicio, lo hace buena como un posible tratamiento natural para la osteoporosis. El efecto depurativo de dicho contenido en silicio, ayuda a prevenir y combatir la celulitis, eliminando las toxinas, excesos de grasa y material de desecho acumulado. También debido a su rico contenido de sílice, un elemento esencial del tejido conjuntivo, aumenta el crecimiento del cabello, mejorar su aspecto y evita que aparezcan canas.
Aumenta las defensas inespecíficas del organismo.
Por la abundancia de taninos, el equiseto es astringente (antidiarréico, hemostático por vasoconstricción local, cicatrizante).
Indicaciones
La gran cantidad de sales de silicio, responsables de sus propiedades remineralizantes, hace que se emplee en casos de fatiga y convalecencia.
Aumenta el número de leucocitos y mejora la resistencia del tejido conjuntivo, por lo que se emplea como antirreumático, consolidando las fracturas de huesos.
El cloruro de potasio y el de aluminio son los responsables de su marcada acción diurética por lo se recomienda en los casos que se requiera un aumento de la diuresis: infecciones genitourinarias (oliguria, cistitis, ureteritis, uretritis, urolitiasis), gota, hiperazotemia, sobrepeso acompañado de retención de líquidos, hipertensión arterial, edemas, hiperuricemia.
Epistaxis, hematuria, metrorragias, dismenorrea.
Vía tópica: úlceras cutáneas, heridas, ulceraciones bucales o corneales, blefaritis, conjuntivitis, parodonpatías, faringitis, dermatitis, eritemas, prurito, vulvovagionitis.

Contraindicaciones
Su potencial para disminuir la tiamina (vitamina B1), potasio bajo y efectos semejantes a los producidos por la nicotina, no hace recomendable su uso durante el embarazo y la lactancia.
La cola de caballo no debe usarse en niños menores de 2 años debido a la presencia de grandes cantidades de sílice.

Advertencias
La cola de caballo debe usarse con precaución en el tratamiento de edemas asociados a insuficiencia renal, en el tratamiento de edemas asociados a insuficiencia cardíaca.
Por su contenido de nicotina, las personas que fuman o quienes usan los parches de nicotina o goma de mascar de nicotina deben evitar la cola de caballo.
No se recomienda el uso de la cola de caballo durante un periodo prolongado de tiempo debido a la presencia de sílice. Los expertos aconsejan evitar el consumo durante más de seis semanas.
Se recomienda asegurar un correcto aporte de agua para evitar deshidrataciones.


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